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Nuestra Institución


Con el apoyo del Contralor General de la época, señor HECTOR HUMERES MAGNAN, impulsor del deporte en la Institución Contralora, y del esfuerzo mancomunado desplegado en el año 1968, por el Presidente del Club, señor Edgardo Salas Hidalgo, y posteriormente de su sucesor, señor Luis Araya Bozzo; del Presidente de la Asociación de Empleados, señor Humberto Arriaza Givovich, y del Médico Director del Servicio de Bienestar, señor Mario Cruzat Mac-Cutcheon, se creó una comisión encargada de conseguir y proveer los fondos para la adquisición de un predio. Esta comisión fue presidida por don JORGE REYES RIVEROS, quien posteriormente pasaría a ser Presidente del Club hasta junio de 1990.

A ellos se habían unido un grupo de deportistas amantes del futbol quienes por largos años deambularon por competencias que se realizaban en distintas canchas, en su mayoría de tierra y sin camarines donde vestirse y teniendo que hacerlo, a veces, al borde de la cancha o en casetas de tablas y sin ducha.

El sueño se materializó en la compra de un terreno, en el sector de La Florida, en lo que fue la chacra Santa Isabel y que correspondía al lote Nº 4 de la hijuela el peral del fundo Santa Amalia de La Estrella, la que fue adquirida a don Edmundo Romo Alvarez en la suma de Eº 146.666.- impuestos incluidos, de los cuales Eº 110.000.- fueron aportados por el Servicio de Bienestar y Eº 36.666.- por el Club Deportivo, cifra esta ultima que corresponde al 25% del costo total y que se ajusto a las exigencias establecidas en el Reglamento del Servicio de Bienestar.

"Un sueño colectivo"


Luego de un intenso mes de trabajo y de trámites legales, el 7 de noviembre de 1968, el presidente señor Eduardo Frei Montalva firma el decreto Nº 1616, del Ministerio de Tierras y Colonización, por el cual autorizó al Contralor General para suscribir la escritura publica de compraventa del bien raíz, la cual se firma el 26 de noviembre de 1968.

Para la concreción de la compra del predio y posterior construcción de las obras del Estadio se contó con la valiosa colaboración de algunos socios, entre os que se contaron: Héctor Gacitúa Solar, quien junto a don Jorge Reyes Riveros fueron los principales impulsores de esta obra; Ricardo Segovia Jofre; Fernando Gacitúa Solar; Julio Santibañez Maffete; Sergio Díaz Bustamante; Alejandro Alarcón Torres; Darío Rojas Lobos; Raúl Hernández Retamal; Eduardo Dominguez Guerrero; Héctor Abasolo Navarro; Lautaro Fernández López; Sergio Muñóz Alarcón y otros que luego pasaron a constituirse como socios fundadores, como ser María Cristina Aravena Longa; Manuel Avendaño Lay; Juan Alegria Ortiz; Sergio Cordero Chavez; José Sepúlveda Canales; Laurentino Espinoza Muñoz; Jaime Quevedo Mundaca; etc..

Junto a ellos otro hombre, de profesión Ingeniero Agrónomo, Jorge Araya Pruneda, quien tuvo por misión poner su sabiduría en forestación para plantar los diferentes árboles, arbustos y plantas y darle así el verdor adecuado al entorno de cada instalación del estadio, todo lo cual se conserva hasta el día de hoy. El fue el primer administrador del campo deportivo.

La Corporación obtuvo su Personalidad Jurídica por Decreto del Ministerio de Justicia N° 55, de 7 de enero de 1971, publicado en el D.O. N° 26.856, de 26 de enero de del mismo año.

Por Resolución N° 1.204, de 31 de diciembre de 1981, del Contralor General, señor Osvaldo Iturriaga Ruiz, se aprobó un convenio celebrado el 1° de abril del mismo año, mediante el cual la Contraloría General entregó en concesión al Club Deportivo, por tiempo indefinido, la administración y manejo del Estadio.